Mi hijo está muy clavado con el videojuego Among Us y aunque no quiero limitar sus aprendizajes digitales, ¿debería prohibírselo?
¿A cuántos de nosotros no nos ha dado por jugar un juego de moda, sea de celular o de video en alguna etapa de nuestras vidas? ¡Quizá algunos lo sigan haciendo!
Ahora la chaviza —por lo menos de la edad de mi hijo de 7, casi 8— está enloquecida con el Among Us. Aunque no quiero limitar sus aprendizajes digitales, he pensado en si debería prohibírselo o sólo limitarlo.
La dinámica de Among Us es online y es para múltiples jugadores. Puede participar de cuatro a diez personas, dos de las cuales (dependiendo del número de participantes) son asignadas como enemigos que deben matar a los demás sin que el resto sepa de quién se trata.
Entonces, unos deben jugar sin ser descubiertos y los demás tienen que intentar descubrirlos.
Los dibujillos están coquetos; son de cierto modo simples, tipo caricatura y quizá de ahí viene la atracción para los niños pequeños. Aunque se trata de ‘matar’, en realidad Among Us no busca el realismo sino la diversión; realmente no asusta y no lo calificaría como violento.
La sencillez también aplica para los controles, pues sólo tienes que ir moviendo al monito en pantalla hacia el sitio al que te quieras mover. Al llegar a algún aparato te aparecen opciones para resolver tareas y claro, al estar junto a alguien también tendrás la opción de matarlo si eres el impostor.
Al leer sobre el juego en internet, lo primero que me vino a la cabeza fue justo ‘Mis hijos juegan Among Us: ¿qué tan seguro es eso?’.
Patricio en pocas ocasiones había tenido la oportunidad de jugar videojuegos pues no creemos que aún sea el momento para ello. Sin embargo, poco a poco se ha reunido con primos y tíos a jugar algunos; siempre en grupos privados para no correr riesgos.
Antes de Among Us, el cabronsísimo se me había escapado y en una ocasión lo escuché reírse con mi cel en mano. Oh, sorpresa: se metió a jugar con quién sabe quién.
Total que perdió y después sólo me platicó que alguien en el audio le había dicho que no gritara y ahí terminó todo. ¡QUÉ MIEDO!
Bastó en ese momento con advertirle que no lo volviera a hacer y por mi parte eliminé el juego.
Among Us es un juego; el internet no
Bueno pues meses pasaron y las clases y las pláticas de amigos y entonces tenía la espinita de jugar el famoso Among Us. Era tal su deseo que le dijo a su tía que lo asiste en sus clases que si le enseñaba a jugarlo y ella le advirtió que lo checaría conmigo.
Los amiguitos en las videollamadas extraescolares no dejaban de hablar de eso…hasta que por fin se le hizo. Lo descargué en la tablet para que jugara con sus amigos y no estuviera fuera de onda. Para esto debo aclarar que mi hijo no tiene celular (ni lo tendrá en un buen rato).
Así pues, un amiguito le dio su código y jugaron…hasta ahí todo ok.
Para cuando hubo una segunda vez, mi hermana estaba con él, esta vez no había cuatro amiguitos, así que jugaron tres amiguitos y un extraño.
Mi hermana se sentó junto a él para observarlo y en el apartado del chat había notificación. Los niños se estaban escribiendo entre ellos, aunque lentamente; mi hijo aun no se suelta a escribir mucho en el dispositivo.
Entonces, el extraño comenzó a decirles porquerías: ‘estoy nalgona y tengo muchas tetas’.
Me cuenta mi hermana que él medio leyó pero estaba más entrado en el juego y solo preguntó que qué era eso. Por supuesto ahí intervino mi hermana diciendo que era una tontería, por lo que Pat no le dio mayor importancia.
Hubo una segunda vez. La abuela le prestó el celular y ella se percató de que le estaban escribiendo ‘NIÑO PENDEJO VETE DE AQUÍ SI NO SABES JUGAR’. En ese momento enardeció la abuela y se hizo de palabras con aquel extraño. Ella también terminó eliminando el juego.
Ojo con las salas de chat de Among Us
Este juego, como muchos otros, no es seguro si dejamos a los pequeños solos; tú lo sabes.
Afortunadamente Pat estaba acompañado y se le dio la información necesaria para que comprendiera lo que estaba pasando y supiera que era incorrecto. Pero ¿cuántos pequeños andan solos leyendo o viendo basura, expuestos a dementes y depravados?
Ningún videojuego online será peligroso para nuestros hijos pequeños si estamos ahí para jugar con ellos. El celular no es niñera ni tía ni hermano. ¡No tuve hijos para encargárselos a un dispositivo!
Digo lo anterior sin afán de juzgar a otras que sí les prestan el celular a sus hijos; cada quien sabe qué tiempo puede dedicar a lo didáctico y a lo lúdico con sus hijos. De lo que yo hablo es de la responsabilidad que tenemos, porque la responsabilidad no es de internet. Y ni hablemos de Policías cibernéticas ni de las otras, que poco harían en nuestro favor si les pasara algo nuestros hijos online.
Justo en internet, en la sección Sapos y Princesas del diario El Mundo, encontré datos interesantes sobre el peligro que representan las salas de chat, donde se encuentra el verdadero riesgo.
Los llamados ‘depredadores infantiles’ suelen ganarse la confianza de los niños para después concretar un encuentro en persona. Un primer consejo que nos dan en este artículo es que nosotros los papás tomemos medidas radicales como censurar la sala de chat.
La Universidad del País Vasco, dice El Mundo, realizó una investigación en 2018 con 2 mil 900 niños españoles para determinar los riesgos a los que estaban expuestos en internet. Para este estudio involucraron a individuos entre 12 y 17 años, y los resultados son los siguientes
- El 26% de los menores recibió mensajes de contenido sexual
- El 33% sufrió algún tipo de acoso
- El 32% observó contenido dañino e inapropiado para su edad
- El 40% chateó alguna vez con desconocidos en diferentes plataformas
- El 19% concretó una cita personal con un extraño
¡QUÉ MIEDO!
Among Us debe significar entre nosotros, entre familia
En alguna reunión familiar descargamos el juego y jugamos con código y sólo entre miembros de la familia para que fuera 100% seguro. Sin embargo, ya nadie trae a conversación Among Us para no tentar a Pat y el tema se ha cerrado.
Obvio los monitos del juego le gustan; pidió playera a Santa de Among Us y unos zapatitos personalizados y sí se los trajeron.
No se trata de juzgar porque entonces nosotros estaríamos fritos también por permitir que jueguen o vean cosas en redes. No es sano tenerlos aislados de esas modas o de ciertos acontecimientos y destrezas que el propio internet les brinda. Incluso es bueno que se asomen a ello para poder enseñarles los extremos y practicar nosotros mismos los balances.
Por ejemplo, pienso en este niño, que no sólo ama jugar sino también quiso ‘emprender’ con su canal de YouTube. Nada hay de malo en que los niños emprendan o en que sepan usar herramientas digitales, pero también pienso en cuán obsesionado está este niño con el juego y con querer likes y ese mundo que no sólo puede producir ansiedad a los peques sino distraerlos de algo tan simple como importante, que es la escuela.
Al final, la disciplina es para ellos pero antes debemos exigírnosla a nosotras mismas como mamás y a los papás también.
Recordemos a cada momento, además de que no estén solos y no dejarlos excederse en el tiempo con los dispositivos, controlar las herramientas de búsqueda de los niños. Patricio usa la versión Kids de YouTube por ejemplo.
Creo que en estos tiempos es bien importante salvar lo más que se pueda de la inocencia de nuestros hijos; ya habrá tiempo para todo lo demás. Mi hijo tiene casi 8 años y ya es un miniadolescente, pero ahí vamos; en familia, ayudándolo con su acelere, cambios, modas; enseñándole que no somos ‘fresas’ y que lo que hacemos es por su bien jajajaja.
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Gracias y feliz inicio de año. ¡A seguir cuidándonos!
Referencia: ‘Mis hijos juegan al Among Us, ¿es seguro? Todo sobre el adictivo juego de moda’. Recuperado de Sapos y Princesas, sitio de El Mundo.es
Portada: Mujer México, Canva, Pixabay
Interiores: Fernanda Romero, Twitter @AmongUsGame
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