Durante las últimas semanas del mes de julio, seguramente muchas y muchos de nosotros fuimos testigos de cómo Instagram se llenó de fotos de mujeres en blanco y negro con la descripción #WomenSupportingWomen. Fue la tendencia en la red social del momento; para los que no tienen mucha idea de qué trataba este challenge, les explico un poco.
A muchas mujeres nos llegaba (o llegaban si tienen la fortuna de tener una red de apoyo de mujeres en su cuenta de Instagram) un mensaje. A la mayoría le llegaba en inglés e invitaba a las mujeres a unirse a un reto con el cual tenían que subir una foto en blanco y negro con el hashtag #WomenSupportingWomen o #ChallengeAccepted en la descripción de la misma. Tras compartirla debías nominar a más mujeres y hacerles llegar el mismo mensaje para que también compartieran su foto.
https://www.instagram.com/tv/CDJ_IOEjoZJ/?igshid=1wfgx8gi6yxvc
El propósito de esta dinámica era realizar un gesto de sororidad y empoderamiento femenino. En lo personal, me parece que este tipo de mensajes relacionados con empoderamiento femenino y sororidad siempre son importantes de recordar y manifestar especialmente en las redes sociales ya que desde pequeñas hemos sido testigos de cómo en los medios de comunicación se fomenta la competencia entre mujeres y cuestiones superficiales como la belleza física o ideas de feminidad que ‘deben’ determinar nuestro valor como mujeres.
De igual manera, considero importante que se explore este tipo de dinámicas en redes sociales ya que las mujeres aún vivimos la falta de equidad de género, que va desde prácticas como el famoso mansplaining (cuando un hombre interrumpe a una mujer para explicarle algo de manera condescendiente, por el simple hecho de asumir que él tiene un mejor manejo del tema que una mujer) hasta situaciones desastrosas como los feminicidios, los cuales lamentablemente son parte de la realidad diaria en nuestro país.
https://www.instagram.com/tv/CDCdcUgD91U/?igshid=5dc05yj95wdm
Sin embargo, a pesar de que siempre resulta importante realizar esta clase de gestos y comunicar mensajes de sororidad entre nosotras, en esta ocasión llovió una serie de críticas ya que había un problema de desinformación en cuanto al origen del mismo.
A muchas de nosotras, como ya mencioné, el mensaje de dicho reto nos llegó en inglés y vimos que celebridades, modelos e influencers alrededor del mundo se sumaron al reto. Y aquí es donde resultó este challenge un poco confuso para mí ya que, recuerdo al menos que con anterioridad ya me había llegado la invitación a hacer este reto por medio de Instagram y otras redes sociales como Facebook.
Todo esto lleva a preguntar ¿Por qué de nuevo se viralizó este reto? Y sobre todo ¿Por qué celebridades, influencers así como figuras públicas se sumaron en esta ocasión? Muchas mujeres y especialistas en activismo digital se hicieron las mismas preguntas y al intentar encontrar una respuesta, se encontraron con el mismo problema de desinformación que experimentamos nosotras.
El sitio de moda Elle compartió una nota explicando la manera en que este challenge se hizo viral y explicaba que a pesar de que el propósito de mandar dicho mensaje alrededor del mundo por medio del mismo era una situación positiva, ‘No se conoce el origen del challenge, ni quién lo inició…’ con exactitud (2020).
Ante esto, medios de comunicación comenzaron a sacar notas asegurando que el challenge provenía de Turquía como protesta a las cifras preocupantes de feminicidios en el país y que, al poner una foto en blanco y negro se intentaba simular la desaparición propia y generar conciencia en la sociedad.
Otros medios comenzaron a publicar que el reto no venía de Turquía, ya que la primera mujer que aparecía en la red social realizando el reto provenía de Brasil y a pesar, de que no se sabe aún el motivo por el cual lo inició, causó una mayor confusión para quienes se tomaron la tarea de investigar el origen del mismo.
A raíz de esta situación, la fundadora de New New Thing y asesora de directores ejecutivos de tecnología Brooke Hammerling invitó a reflexionar sobre la eficacia de este challenge en pro de la lucha feminista por medio de su boletín semanal, argumentando que a pesar de estar totalmente a favor de las mujeres que apoyan a las mujeres y a su vez, estar agradecida con las mujeres que la nominaron, no comprendía cómo una selfie, que podía ser resultado de la vanidad de una persona, podía contribuir a un movimiento de empoderamiento feminista y más aún cuando hay un problema de desinformación por detrás.
Hammerling sugirió entonces compartir publicaciones o retratos de mujeres que nos inspiran, lo cual estaría un poco más acorde con lo que esto está tratando de lograr con el reto; nos permitiría dejar de enfocarnos en nosotras mismas para invitarnos a conocer otras realidades y así solidarizarnos entre nosotras.
Es posible que cada mujer que realizó el reto tenía una buena intención al compartirlo, y al hacerlo muchas de nosotras no dimensionábamos el alcance que este hashtag podía llegar a tener al viralizarse, ya que llegó aproximadamente a 8 millones de personas que compartieron su foto.
Como les mencionaba, no es la primera vez en la que aparece este reto en las redes sociales. Sin embargo, lo que ocurrió en esta ocasión según la experta Cristine Abram, de la agencia especializada en redes sociales Later, es que el hashtag tuvo una mayor visibilidad porque el algoritmo de Instagram ya estaba familiarizado con él.
En este sentido, resulta importante hacer conciencia del efecto que tienen los algoritmos al realizar este tipo de cadenas ya que, un daño colateral que surgió a raíz de la viralización de este hashtag fue la poca visibilidad que tuvieron las publicaciones relacionadas con motivo del Día Internacional de la mujer afrolatina, afrocaribeña y de la diáspora celebrado el 25 de julio.
Al respecto, la propietaria de la cuenta de Instagram @brownsuugahh invitaba a sus seguidores a reflexionar pues si bien el reto carecía de un propósito concreto, debido al algoritmo de Instagram se viralizó rápidamente, ocasionó que se le diera menos visibilidad al movimiento que encabezan estas mujeres en redes sociales, quienes aprovechan este día para generar una conversación en las redes sobre su lucha.
Aquella usuaria sugería entonces realizar una previa investigación del contexto antes de compartir cadenas e invitaba a sus seguidoras y seguidores a compartir algún perfil o publicación de ‘una mujer/cuerpa feminizada negra…una de esas mujeres que necesitamos leer y escuchar.
https://www.instagram.com/p/CCHrm00ph65/?igshid=tgo8dkeoejox
Si bien el hashtag #WomenSupportingWomen se pudo haber compartido y consecuentemente virilizado a partir de buenas intenciones, en términos de activismo, el sentido y propósito del mismo fue un tanto inconsistente debido a la desinformación.
Es importante reflexionar y aprender sobre los efectos que este tipo de cadenas y retos en las redes sociales para hacer un mejor uso de las herramientas digitales, que nos permiten no sólo dar a conocer nuestra propia realidad y nuestra lucha sino que también nos permiten ver otras realidades que nos ayudan a tener una perspectiva más amplia de las luchas feministas. Al incluirlas y ser conscientes de ellas, podremos realizar un activismo más íntegro.
Interiores: Instagram @brownsuugahh @mujermexico_oficial @natalieportman y YouTube.
Portada: Instagram @Natalieportman