Aesha Ash es una bailarina de ballet que busca empoderar a las mujeres afroamericanas a través de su fundación The Swan Dreams Project.
Aesha creció en la ciudad de Rochester, en Nueva York, donde acudió a las escuelas de los suburbios, como parte de un programa para fomentar la diversidad.
Sin embargo, pronto se enfrentó a los estereotipos en contra de la comunidad afroamericana, por lo que aprendió a sobreponerse de esa situación a través del baile.
A partir de los 5 años, Aesha comenzó a estudiar tap, jazz y ballet; esta última disciplina la cautivó por completo gracias al grado de complejidad que implicaba ejecutarla; sin embargo, su madre le dijo que formar una carrera sería difícil debido que pocos bailarines del sector eran negros.
Las palabras de su mamá la motivaron a continuar y más tarde ingresó a la Escuela de Ballet Americano, en Nueva York.
A los 18 años, Aesha se unió al New York City Ballet y posteriormente también formó parte de legendarias compañías de ballet europeas; por ejemplo:
- Bejart Ballet de Suiza
- Alonzo King’s Lines Ballet de San Francisco
La bailarina dijo adiós a los escenarios en 2008; sin embargo, su labor en el ballet continuó en 2011 a través de la fundación The Swan Dreams Project, cuyo objetivo es presentar imágenes que derriben los estereotipos en contra de las mujeres afroamericanas:
“A través del uso de las fotografías y mi carrera como bailarina de ballet, quiero ayudar a cambiar la imagen caricaturizada, objetivizada y demoralizada de las mujeres afroestadunidenses mostrándole al mundo que la belleza no es de ninguna raza o grupo socio económico en particular”
Asimismo, Aesha busca inspirar a mujeres de color y a quienes pertenecen a comunidades desfavorecidas, por lo que ha recorrido la Unión Americana transmitiendo el mensaje de que la belleza y el talento no están condicionados por la raza o el nivel socioeconómico.
Además, también desea que su fundación aumente el patrocinio para que muchas féminas puedan acceder a esta disciplina, a la que definió como una ‘hermosa forma de arte’.
En 2016, el Museo Nacional de Historia de la Mujer reconoció a Ash por ser una de las primeras bailarinas de ballet profesionales afroamericanas y por haber fundado The Swan Dreams Project, que dirige un campamento de verano en Rochester y un programa extracurricular en San José, California.
Aunque Aesha Ash ha ganado numerosos premios por su impresionante trayectoria artística, durante una entrevista afirmó que su más grande logro es haber enorgullecido a su familia al lograr sus sueños, por lo que ahora desea motivar a las nuevas generaciones a perseguir los suyos:
«Todo el trabajo duro y el sacrificio valieron la pena. Cuando tienes un sueño, créelo con todo tu corazón»
Con información de Milenio, The Washington Post y NewsOne
Portada: Instagram @theswandreamsproject
Interiores: Instagram @theswandreamsproject