Algunos tintes contienen sustancias químicas peligrosas. Así que, si vas a pintarte el cabello y estás embarazada, checa esta información.
Si estás embarazada y estás pensando en pintarte el cabello, hay cosas que debes saber antes de hacerlo.
Tal vez has escuchado que teñirse el pelo y hasta oler el tinte puede causar problemas para el feto.
Sin embargo, este es un mito y, en realidad, nadie sabe de dónde y por qué surgió.
Aunque los tintes contienen químicos como el amoniaco y agua oxigenada, no hay estudios que respalden que representan un peligro en el embarazo.
De acuerdo con los expertos, si bien estas sustancias son absorbidas por el cuero cabelludo, su concentración es mínima.
Esto significa que no pueden ingresar al torrente sanguíneo, atravesar la placenta y dañar al producto.
En realidad, su acción en el cuerpo humano es comparable a la del maquillaje, el esmalte de uñas y los champús.
Es por ello que pintarse el cabello no se considera peligroso durante el embarazo.
Sin embargo, eso no significa que los tintes para el pelo sean 100 por ciento seguros.
Los expertos también han advertido que estos pueden causar irritación o reacciones alérgicas en mujeres embarazadas.
Esto se debe a que todos los componentes de los tintes entran en contacto con la piel.
Esto es especialmente peligroso porque las mujeres embarazadas no pueden tomar cualquier medicamento para controlar una alergia.
Además, los productos de coloración, teñido o decoloración tienen esa advertencia en sus etiquetas, así que no debes pasarlas por alto.
Opciones para pintarte el cabello en el embarazo
Estar embarazada no significa que debes renunciar a pintarte el cabello. Hay formas de garantizar el bienestar de tu bebé.
El primer trimestre es el más vulnerable debido a que en este periodo se forman los órganos vitales, la cabeza, el cuerpo y las extremidades del feto.
Los expertos recomiendan que lo mejor es esperar a que haya concluido este periodo para someterse a algún cambio de coloración en el pelo.
Además, la mujer embarazada debe someterse a una prueba de alergia 48 horas antes del proceso cosmético.
Elige una zona oculta, puede ser detrás de la oreja, y aplica el color puro y sin fijador en la piel.
Si no sientes escozor o alguna molestia, el riesgo de que el tinte provoque una alergia es prácticamente nulo.
En caso de que no quieras tomar ningún riesgo, los colorantes vegetales son tu mejor opción en el embarazo.
Estos contienen menos sustancias químicas que los de acción permanente.
Además, puedes elegir hacerte reflejos o mechas, ya que estos no requieren que el tinte toque el cuero cabelludo.
Como recomendación final, si acostumbras pintarte el cabello en casa, usa guantes y no te dejes el producto más tiempo del indicado.
Con información de Enfemenino, Bebés y Más y Huffpost
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