El feminicidio de la Beba de Aragón está asociado con el síndrome de Kempe, si no sabes de qué se trata, a continuación, te explicamos todo lo que debes saber.
En 1962, el doctor Henry Kempe publicó un artículo en el que describió lo que actualmente conocemos como síndrome del niño maltratado.
La investigación causó controversia entre la comunidad médica, pues hasta ese momento no existía un concepto para referirse al abuso de menores.
El experto señaló que decidió elaborar el informe tras estar a cargo de numerosos casos en los que las lesiones de los bebés y niños eran inconsistentes con las historias que contaban con sus padres.
Sin embargo, no fue sino hasta la llegada de los rayos X que finalmente pudieron emitir un diagnóstico preciso sobre las agresiones, algunas de ellas sistemáticas, que los menores sufrían en sus casas.
El doctor Kempe también fue un pionero en determinar la necesidad de que los doctores detecten señales en los padres que indiquen que hay maltrato hacia los niños, quienes muchas veces eran responsabilizados por la violencia ejercida contra ellos.
Incluso, el médico fue el primero en señalar que, en casos extremos, separar a las víctimas de sus familias era la única opción, pues además de protegerlos de un ataque letal, las secuelas de las agresiones físicas, psicológicas y sexuales duran toda la vida adulta:
“Característicamente, estos niños que no tienen lesiones cerebrales y cuya inteligencia es normal fracasan en el colegio, pues no saben escribir, leer o comunicarse. Aprendieron desde una edad temprana que la comunicación es peligrosa, llamar la atención es peligroso, por eso tratan de evadir miradas, tratan de volverse invisibles y, de hecho, quedan emocionalmente atrofiados de por vida”
En México, D. U. Riojas y S. C. Manzano fueron los primeros en detectar la existencia de maltrato infantil gracias a estudios radiográficos, en 1968.
Sin embargo, no sería sino hasta 1981 que se hablaría sobre la necesidad de concientizar a médicos y otros profesionistas que tienen contacto con menores sobre este tema, gracias a los esfuerzos del doctor Jaime Marcovich.
En el año 2000, la Organización Mundial de la Salud (OMS) finalmente consideró al síndrome de Kempe, o del niño maltratado, como un problema de salud pública a nivel mundial.
Actualmente, existen diversas formas de abuso infantil: sexual, psicológico, por negligencia y físico.
Además, los expertos han emitido una serie de recomendaciones para evitar que los menores, sobre todo en su etapa como lactantes, sufran lesiones de cualquier tipo:
- Nunca sacuda a un bebé o niño pequeño ni en juego ni por enojo
- No cargue a un bebé durante una discusión
- Si comienza a molestarse o enojarse con un bebé, aléjese de él e intente calmarse. Busque ayuda
- Contacte a la línea local para el manejo de crisis o de maltrato al menor
- Busque ayuda profesional y asista a clases sobre la crianza de los hijos
Adicionalmente, han pedido a las personas en general que no ignoren las señales ni sospechas de que un niño es víctima del síndrome de Kempe.
De acuerdo con los expertos, se debe buscar apoyo de inmediato ante la presencia de cualquiera de estos síntomas:
- Convulsiones
- Disminución de la lucidez mental
- Irritabilidad extrema o cambios en el comportamiento
- Letargo, adormecimiento, ausencia de sonrisa
- Pérdida del conocimiento
- Pérdida de la visión
- Paro respiratorio
- Piel pálida o azulada
- Falta de apetito
- Vómitos
Con información de BBC, Mayo Clinic y MedlinePlus
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